PROTO EPARQUÍA DE IBERIA
PROTO EPARQUÍA DE IBERIA

Monday, May 01, 2006

SACERDOCIO FEMENINO - Iº



Cada mujer bautizada se convierte en otro Cristo, igual que sucede con un hombre.

“Efectivamente todos vosotros sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús, pues todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo habéis sido revestidos. Ya no hay distinción entre judío y no judío, entre esclavo o libre, entre varón o mujer, porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús” Gal. 3,26-28

Toda mujer bautizada comparte plenamente el sacerdocio de Cristo, su realeza y su misión profética.

Lo sabemos por el Evangelio. Jesús la había preparado como una Pascua con sus discípulos “¡Cuánto he deseado celebrar esta Pascua con vosotros antes de morir¡” (Lu 22,7-16)

Ahora sabemos, por el Evangelio que las mujeres tomaban parte en las comidas comunitarias de Jesús.

Además, toda la familia, incluidas las mujeres, tenían que tomar parte en la comida pascual (Ex 12,1-14)
Los Evangelios mencionan la llegada de Jesús y los doce “al atardecer” (Mc14,17), pero otros discípulos ya estaban preparándolo todo, Esto incluye las mujeres.

Es a todos los discípulos que Jesús dice:
“Tomad y comed esto es mi cuerpo."
Tomó luego una copa y después de dar gracias,se la dio diciendo:
‘Bebed todos de ella, porque esta es mi sangre!Haced esto cuantas veces bebáis en recuerdo mío!”
(Mt26,26-28; 1Co 11,23-25)

“Todos los que han sido justificados por la fe en el bautismo están incorporados a Cristo. Por eso son llamados Cristianos. Por eso están aceptados como hermanos y hermanas por los hijos de la Iglesia Católica”. (Ecumenism § 3).

“Muchos de las más significativos elementos y dones que conjuntamente construyen y dan vida a la misma Iglesia, pueden existir fuera de la Iglesia Católica”.
(Ecumenism § 3)
“Cristo convoca a la Iglesia, mientras ella recorre su camino en esta tierra, hacia una continua reforma, una reforma que siempre ha necesitado”
(Ecumenism § 5)

La raíz de cualquier vocación se basa en haber sido creados por Dios.

Todas nuestras aptitudes provienen de la mano de Dios y en cada llamada, sea al trabajo que sea, a un ministerio, a un tipo de vida o a una misión especial, surge Dios llamándonos desde nuestra nada, para ser las personas que somos.

Respecto a la vocación sacerdotal, siempre ha habido en la Iglesia, la convicción de que las auténticas vocaciones provienen de Dios, y que sería criminal bloquear estas vocaciones.
Kyr Yospehos Emmanouèl IIIº O.S+G

Posted by ORDEN BONARIA :: 5:37 AM ::
---------------------------------------